LA SIGUIRIYA GITANA
Els sons obscurs de la pena
Per Josep Vicent Frechina
CARAMELLA 18 – AMB ALTRA VEU

«La siguiriya gitana comienza por un grito terrible. Un grito que divide el paisaje en dos hemisferios ideales. Después la voz se detiene para dar paso a un silencio impresionante y medido. Un silencio en el cual fulgura el rastro de lirio caliente que ha dejado la voz por el cielo. Después comienza la melodía, ondulada e inacable en sentido distinto a Bach. La melodía infinita de Bach es redonda, la frase podría repetirse eternamente en un sentido circular, pero la melodía de la siguiriya se pierde en sentido horizontal: se nos escapa de las manos y la vemos alejarse hacia un punto de aspiración común y pasión perfecta donde el alma más dionisíaca no logra desembarcar». Només Lorca sembla haver copsat en tota la seua magnitud –amb la saviesa suprema dels poetes– el misteri musical que encobreix la seguiriya, siguiriya, o com bonament se us ocórrega de transcriure la genuïna pronúncia meridional de seguidilla.

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